Alimentos que favorecen el envejecimiento
Hoy en día aún no se ha inventado la forma de parar el tiempo para evitar que el envejecimiento haga mella en nosotros . Y es que, cada día se va notando un poco más: las arrugas se acentúan, aparecen manchas y patas de gallo, la piel pierde su brillo e hidratación natural, etc.
Sin embargo, hay diversas formas de retrasar y frenar los efectos del envejecimiento. Entre las más eficaces están seguir una dieta equilibrada, realizar deporte y evitar malos hábitos; así nos mantendremos activos, jóvenes y sanos.
Si nos centramos en la dieta, para combatir y frenar el envejecimiento es aconsejable reducir o evitar el consumo de ciertos alimentos que potencian y aceleran dicho proceso.
Alimentos que favorecen el envejecimiento
Los siguientes alimentos favorecen el proceso de envejecimiento por sus activos, propiedades y efectos en el organismo; por ello, es importante reducir su consumo e incluso, en ciertos casos, evitarlo.
- Café. El consumo excesivo de café provoca deshidratación en la piel, que pierde tono. Además mancha los dientes y dificulta la calidad del sueño por lo que genera la aparición de bolsas y ojeras.
- Bebidas azucaradas, sobre todo las que son carbonatadas. Favorecen la acumulación de gases, el aumento de peso y problemas de salud como la diabetes. Además, muchas de ellas contienen altas dosis de cafeína alterando la calidad del sueño, que junto a la falta de descanso repercute en la elasticidad de la piel.
- Carne procesada. Contiene aditivos que provocan inflamación en el organismo, afectando al colágeno y a la elasticidad de la piel. Como consecuencia se acentúan las arrugas y aparecen signos de expresión.
- Carbohidratos simples como las tortas de arroz, el pan blando etc. Tienen un índice glucémico alto que ayuda a reducir la elasticidad de la piel y los músculos. Además pueden provocar picos de insulina, aumentando el azúcar en sangre, que genera un aumento de peso.
- Sal. Un consumo excesivo de sal en la dieta aumenta la tensión arterial y provoca una reducción en la producción de colágeno que deriva en un envejecimiento prematuro. También puede provocar dermatitis o sequedad en la piel ya que la sal nos deshidrata.
- Azúcar. Su consumo excesivo acelera el envejecimiento reduciendo la elasticidad de la piel que afecta directamente a los vasos sanguíneos, acelerando la inflamación. Además de que puede derivar en enfermedades como la diabetes.
- Grasas trans. Aportan al organismo calorías vacías y su exceso puede obstruir las arterias.
- Alcohol. Provoca una deshidratación muy rápida, con sus respectivos efectos perjudiciales para la salud.
- Picante.Dilata los vasos sanguíneos favoreciendo su ruptura, lo que provoca que la piel pierda elasticidad, tonificación y su color natural.
- Carnes rojas. Son ricas en carnitina, una sustancia que en exceso endurece de los capilares y afecta al envejecimiento prematuro. Por ello, se recomienda comerlas máximo 2 veces por semana.
- Conservantes artificiales. Contienen sulfitos que afectan directamente a los vasos sanguíneos, favoreciendo la pérdida de elasticidad y la aparición de arrugas en la piel.