Deporte y defensas: cómo afecta el ejercicio al sistema inmunológico
Otros efectos del deporte sobre nuestro organismo son mucho más conocidos y populares, de hecho son los que nos animan a practicarlo. En este artículo detallaremos la relación entre la práctica de deporte y las defensas de nuestro organismo, y la importancia de mantener ciertos hábitos para que el ejercicio físico no acabe dañando nuestro sistema inmunológico. [p]
Cuando nuestras defensas se ven afectadas por factores internos (enfermedades, estrés, sedentarismo o la edad) y/o externos (alimentación, tabaco, cafeína o cambios estacionales) nuestro sistema inmunitario se debilita, además de afectar también a otras funciones del organismo. [p]
Para evitar esta situación es aconsejable realizar una actividad física moderada ya que favorece la activación del metabolismo de las grasas y tiene efecto antioxidante y de neutralización del estrés que tanto perjudica al sistema inmune. Además, el deporte genera un aumento de células inmunocompetentes favoreciendo su movilidad por el torrente sanguíneo y su activación, mayor producción de anticuerpos y de citoquinas antinflamatorias. [p]
Sin embargo, hay que tener en cuenta que un gran volumen de actividad (más de 8 horas de entrenamiento semanal) o el deporte de alta intensidad disminuyen las defensas debido al estrés al que se somete al organismo. [p]
Beneficios del deporte sobre las defensas [p]
Como ya hemos comentado, el ejercicio físico moderado, realizado de forma habitual, beneficia y fortalece al sistema inmunológico en todas las edades, especialmente en personas jóvenes y mayores. Y es que consigue: [p]
- Activar el metabolismo: El ejercicio produce el catabolismo de las grasas obteniendo energía para activar los músculos y ponerlos en movimiento. Esto hace que desciendan los niveles de grasa en el cuerpo y mejoren las condiciones para el sistema inmune, el corazón y demás órganos. [p]
- Efecto antioxidante: cuando la actividad física realizada es moderada, facilita la producción de enzimas colaboradoras en los procesos antioxidantes intracelulares del organismo, especialmente en las células inmunitarias: neutrófilos y macrófagos. [p]
- Liberación de ciertas hormonas. Las hormonas regulan el crecimiento, la reproducción y actúan también modulando las acciones del sistema inmunológico. El ejercicio favorece la producción de adrenalina, de la hormona de crecimiento (que estimula la secreción de IL-12, facilitando la activación de células Inmunocompetentes) y de pequeñas cantidades de cortisol (quebloquea la inflamación disminuyendo el riego de sufrir enfermedades de base inflamatoria como infartos, artrosis, alzhéimer, párkinson, ciertos tumores, diabetes, etc.). [p]
- Neutralizar el estrés: el sistema nervioso central, influenciado por el deporte, regula el sistema inmune de manera directa o a través de intermediarios hormonales; se produce una producción de endorfinas (hormona de la felicidad) con poder analgésico que proporciona alivio, calma y bienestar al organismo favoreciendo el sistema inmune ya que disminuyen el estrés crónico neutralizando los inductores de estrés a nivel cerebral y del hipotálamo. [p]
- Activa la expansión de células inmunocompetentes. La práctica de ejercicio aumenta el volumen de los capilares y la frecuencia cardíaca bombeando más sangre a todo el cuerpo y favoreciendo la expansión, por todo el organismo a través de la sangre y linfa, de las células inmunocompetentes. Así, durante el ejercicio moderado se produce un aumento de la concentración en sangre de estas células potenciando la acción inmu-vigilante de las células inmunitarias, que aumentan su movilidad y facilitan su acceso a microbios presentes en el torrente sanguíneo o en los tejidos. [p]
- Reducir el riego de padecer infecciones ya que mediante el deporte se eliminan bacterias de los pulmones y vías respiratorias; además, se produce un cambio en los anticuerpos y los leucocitos (células del sistema inmunitario que combaten las enfermedades, proteínas que neutralizan los microorganismos patógenos y agentes externos) que circulan más rápidamente por el organismo, detectando y combatiendo las enfermedades de manera más rápida y efectiva. [p]
Consejos para mantener las defensas altas si practicas deporte [p]
Todo deportista necesita mantenerse sano y tener un sistema inmunológico fuerte para poder afrontar la actividad que va a realizar y conseguir sus objetivos sin dañar su salud y bienestar. Para ello es importante cuidar aspectos como: [p]
- La alimentación. Una dieta inadecuada o insuficiente produce una caída de las defensas. Por tanto, una dieta equilibrada y completa ayuda a fortalecerlas. [p]
- El descanso y el sueño, tanto la cantidad como la calidad. Lo aconsejable es dormir entre 7 y 9 horas diarias para que el cuerpo descanse como es debido. Por ello, si cuesta conciliar el sueño es importante adquirir hábitos saludables para ir a dormir como no emplear pantallas, habitación fresca y sin luz, evitar siestas de más de 20 minutos, etc. [p]
- Los cambios de temperatura. Cuando el ejercicio se realice al aire libre hay que abrigarse conforme a la temperatura ambiental. Es importante no abrigarse en exceso al finalizar el entrenamiento, estamos empapados de sudor y nuestra temperatura corporal es elevada, por ello al interrumpir la actividad física nuestra temperatura baja y sentimos frío (factor que nos expone a las infecciones). [p]
Si eres deportista de élite o practicas muchas horas de deporte o actividad de alta intensidad deberás extremar el cuidado de los dos primeros aspectos citados. En Probelte Pharma hemos desarrollado Keriba Sport, un complemento alimenticio a base de Pomanox, magnesio y vitamina B6, específico para las necesidades en el deporte, que contribuye entre otras cosas a la regulación de la actividad hormonal, a la formación normal de glóbulos rojos y al funcionamiento normal del sistema inmunitario.